Diario de una naranja completa - Capítulo XV
- Gianni Berroteran
- 23 dic 2023
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 2 may 2024
Estaba muy molesta conmigo por varias cosas a la vez:
1- Molesta por buscar información que me estaba haciendo daño.
2- Molesta por tener tan idealizado a mi ex que no pude ver las cosas que eran obvias para
otros.
3- Al mismo tiempo, molesta por no saber si creerle a los demás; no quería que me
siguieran viendo la cara de tonta, pero igual sentía que no era justo creer lo que yo no
había visto con mis propios ojos.
Habían pasado unas cuantas semanas en las que decidí alejarme de todo; sentía que tant información me estaba atormentando, yo estaba muy confundida y sintiéndome muy sola.
Recuerdo que tuve una conversación conmigo misma en donde me exigí tener un poco más de malicia; algo que me incomodaba, yo pensaba y sentía que necesitaba ser siempre la “niña buena”; ¿pero a dónde me había llevado eso?
Disclaimer: NO estoy diciendo que hay que ser malas, recuerden que la Gia que pensaba esto que estoy contando, era una muy inmadura y sin inteligencia emocional.
Cuando hablo de la “niña buena”, me refiero a esa personalidad que adoptas:
complaciente y en búsqueda de aceptación constante en la que te olvidas muchas veces
de tu dignidad, de tus límites y de tus estándares para agradar o ser elegida.
Si hay algo que he aprendido en la vida es que “cuando el río suena es porque piedras
trae”, así que me propuse ser muy cuidadosa con lo que veía, para yo misma hacerme una
opinión y ver si lo que me estaban contando era verdad.
Era fin de semana y le escribí a esa amiga (la que compartía mucho con mi ex) como de costumbre para preguntarle si tenía más información.
Recuerdo que me comentó que mi ex y la chica de su trabajo tenían días sin estar tan
juntos, que él ya no le hablaba tanto de ella; y que de hecho la chica se estaba
comportando muy celosa con él, y que mi ex estaba cansando de eso.
Recuerdo que sus palabras fueron algo así como: “no te preocupes porque creo que ya no están juntos”. Cuando me dijo eso pensé que no puede ser real lo que me estaban diciendo sobre ella y mi ex, porque si fuera así, no me estaría dando esta noticia.
El domingo en la mañana, bajé a pasear a mi perro y ella me mandó un mensaje
preguntándome si podía llamarme, le dije que sí, e inició la conversación un poco nerviosa.
Me dijo que tenía que contarme algo antes de que me dieran información falsa; y si, eso
me pareció raro.
Me comentó que la noche anterior había sido el cumpleaños de esta chica con la que mi ex
se había involucrado de su trabajo, que ella (mi amiga) y mi ex estuvieron en la celebración
un rato pero ella decidió irse antes de que terminara; y le pidió a mi ex que la llevara a su
casa para no pedir un taxi; a lo que él entonces decidió irse también. Como se fueron
juntos la cumpleañera empezó a escribirle a mi ex diciéndole que sabía que tenia algo con
mi amiga, y que todas sabían que ellos estaban juntos. La chica estaba muy celosa, y por
eso mi amiga creía que el chisme se iba a esparcir muy rápido.
Mi amiga muy angustiada me dijo que esto no era verdad, que no estaban juntos, que solo
eran amigos, y que antes de que se hicieran rumores más fuertes, ella prefería contármelo
primero.
Yo le dije que no se preocupara y le agradecí por haberme llamado; le pedí que se
tranquilizara, y le di las gracias por siempre contarme todo lo que le pedía. Pero no les voy
a mentir, me quedé muy inquieta, porque ya eran muchos rumores y comentarios; no solo
de personas externas a mi grupo de amigos, sino de internos también que hablaban de
haber visto cosas y situaciones entre ellos, incluso desde que mi ex todavía era mi novio.
Recuerdo que lloré muchísimo por días, y lo hablé con mi terapeuta. Ella solo me
recordaba que la opinión de los demás venía cargado de sus propios juicios, por lo que
una parte de mí decidió no creer, pero la otra parte se sentía muy traicionada, no solo por
mi ex, sino por mi amiga también.
Esta situación estuvo en mi cabeza muchos días; no quería creerlo, pero al mismo tiempo,
sentía que necesitaba saber la verdad.
Yo estaba evitando mucho salir de fiesta, para no sentirme como la última vez que lo hice,
pero para el próximo domingo unas amigas me estaban invitando a ese mismo Lounge
que nos gustaba tanto, y yo sabía que esta amiga iba a estar allí. Así que quise ir, pero esta
vez a estar muy pendiente de cualquier cosa que me pudiera ayudar a quitarme la duda.
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