Capítulo XXXI - El viaje de cuento de hadas
- Gianni Berroteran
- 27 abr 2024
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 2 may 2024

El problema de no sentirte suficiente en un vínculo, es que ves amenazas en todos lados. Y cuando te sientes amenazada tu sistema nervioso se pone en constante alerta para protegerte del peligro que percibe; en este caso el peligro de “perder el trofeo”: la atención del hombre en cuestión.
Por eso es TAN importante trabajar en terapia tu relación con la falta de atención que ha habido en tu vida. Porque cuando una pareja en el presente te detona una carencia, no se trata de lo que está pasando en ese momento solamente, si no de todas las veces en tu vida donde te has encontrado con ese carencia, y la narrativa que te has contado en torno a esta.
La búsqueda desesperada de atención de una persona NO DISPONIBLE
EMOCIONALMENTE, viene de una falta de atención de un padre (o cuidador principal) no
disponible emocionalmente o físicamente para ti en tu infancia.
Pues, ese era mi problema, yo seguía buscando a un hombre al que yo pudiera “cambiar”
con mi esfuerzo y amor, y pasarlo de: desinteresado a enamorado. Y eso es lo que hace
una niña herida, elegir el camino difícil, retador y hasta imposible que le recuerda la
dinámica de su niñez.

Por su parte, una adulta consciente RECONOCE cuando una relación no la honra y elige no ponerse en esa situación a sí misma, y prefiere solo vincularse con una persona que desde el PRINCIPIO la elija también a ella para una relación de compromiso; y no solo para pasar
el rato, “fluyendo” y recibiendo todos los beneficios de una novia, sin serlo.
Obviamente la Gia de este capítulo aún no lo veía de esta forma. Luego de tanto “tira y
encoge” y un vínculo súper tóxico entre un apego ansioso y uno evitativo que no sabían encontrar un equilibrio, y no eran compatibles para construir una relación; yo me quedé tranquila con la idea de que aún no era momento para hablarle a mi mamá y hermanasobre él; sentía que lo que nos unía era muy frágil, así que POR SUPUESTO que en vez de terminarlo, volví a poner mis esperanzas en seguir intentando convencerlo.
Ahora escribiendo esto, recuerdo la sensación de mi cuerpo durante esa relación, y era
una ansiedad e incertidumbre constantes que NO TIENEN SENTIDO, porque no se entra a
relación de pareja para sentirnos así.

Todos mis compañeros de apartamento organizamos un viaje de fin de semana a una ciudad portuaria a 2 horas de Marrakech, llamada: Essaouira. Es una ciudad amurallada con una playa hermosa y un casco histórico muy bello. Yo me emocioné porque es mi ciudad favorita de Marruecos y me parece súper romántica.
Como toda idealizadora, me imaginé que él y yo la pasaríamos increíble y que el vínculo se podría afianzar más.
Uno de los problemas más grandes de lo que nos han enseñado socialmente sobre elamor de pareja, es que entramos a las relaciones desde expectativas que ASUMIMOS que la otra persona también tiene; porque ingenuamente pensamos que nuestro concepto de amor, de pareja, de compromiso, etc... son lo mismo para los demás. Y justo este error es
el que lleva a la mayoría de relaciones a fracasar: Acuerdos implícitos.
Si pudiera elegir una palabra para describir ese viaje, sería: FRUSTRACIÓN.
Nada de lo que yo esperaba que pasara sucedió, nunca me sentí halagada por los outfits
que llevé para lucírselos, nunca me sentí cortejada en las calles hermosas de la ciudad,
nunca me sentí atendida de la forma en que yo lo hice con él, nunca me sentí su prioridad
en las cosas que hacíamos como grupo. Pero ¿por qué yo estaba esperando que él hiciera
algo que casi nunca hacía?

La frustración (decepción, desilusión) son emociones que aparecen cuando tus
expectativas no están siendo cumplidas; y hoy me hago TOTALMENTE responsable de ellasporque este chico, aunque era muy buen amigo, buena persona, buen compañero de trabajo; ya me había DEMOSTRADO muchas veces que no era una buena pareja (por lo menos para mí en ese momento) porque NO ESTABA DISPONIBLE EMOCIONALMENTE.
Yo misma condené ese viaje desde el momento en el que construí una fantasía en mi cabeza (no basada en la evidencia) de cómo iba a ser. En vez de disfrutarlo con el grupo entero, sin poner mi foco en él, y dejando que lo que pasara me mostrara qué esperar y que no, para tomar decisiones congruentes y que me honraran a mí.
Ahora entiendo que desde su NO DISPONIBILIDAD, quizás él sentía que lo que me ofrecía
era demasiado, pero para mí se sentían como migajas. No era su culpa, tampoco la mía,
solo no estábamos en la misma página.
Comments