top of page

Capítulo XXVIII - ¿Somos algo?

Me armé de valor para hacerle la pregunta más temida: ¿Qué somos y hacia dónde

vamos? Nos da mucho miedo hacerla porque no queremos escuchar que nos digan:

“Nada, y hacia ningún lado”, ya que desde las heridas emocionales le damos el significado

a esto de rechazo, en vez de verlo como lo que es: una REDIRECCIÓN.


La incertidumbre de saber que sucede en este nuevo vínculo

La adulta consciente NO siente atracción por quien la rechaza o no está disponible

emocionalmente para ella. La adulta sabe que una relación así no la honra y le traería

mucho sufrimiento, y ella misma no se haría eso (aunque tomar la decisión la rete). Peroclaro que la Gia de esta historia aún no era una adulta consciente, aunque ya tenía 31 años. Como ven, la edad no es indicativo de madurez e inteligencia emocional.


Así que aprovechando que este chico estaba más accesible esos días, quizás porque se sintió amenazado por primera vez de perder mi atención (lo cual no es indicativo de amor sino de ego), le pregunté hacia dónde iba lo de nosotros. Enseguida se mostró algo incómodo, aunque nunca dejó de ser amable y respetuoso, (y lo entiendo porque como les dije capítulos atrás, el estaba en medio del duelo por una relación que acababa de terminar), me dijo que fuéramos lento, a ver qué pasaba.


Obvio esa respuesta me generó mucha ansiedad, porque desde la herida de abandono

necesitamos certezas, queremos todo para ya, ese apego ansioso que genera tanto daño

en las relaciones; y por su puesto él con su apego evitativo (cerrado emocionalmente por

su duelo) estábamos construyendo la dinámica perfecta de “frío-calor” que genera una co-

dependencia.


Ahora, volviendo a lo del rechazo. Por su puesto que su respuesta me hizo sentir

rechazada, no era lo que yo quería escuchar. En mi cabeza era lógico que ya me pidiera que fuera su novia, porque la noche anterior me había dicho que se había sentido celoso.


Recuerda que la niña herida cree que los celos son “amor”, y nada que ver. Por esto su respuesta me confundió mucho, desde mi ignorancia sobre cómo funciona el amor sano.


Así que en vez de REDIRECCIONARME (salir de ese vínculo confuso), seguí haciéndole preguntas de sus razones; ahora entiendo que esto lo hice inconscientemente buscando

algo que yo pudiera usar a “mi favor” para enamorarlo o convencerlo de elegirme.


No voy a contar acá sus problemas personales, pero si vi en su preocupación por ahorrar

dinero y recuperarse económicamente, una oportunidad de “salvarlo”. Al ser la directora

artística yo tenia un muy bien sueldo, y de la forma más irresponsable decidí usar esto

para comprar su atención en vez de ahorrarlo o invertirlo para crecer financieramente (Si,

las heridas emocionales influyen en nuestra relación con el dinero y pueden afectarla

mucho).


Y ahora la salvadora

Quería que se sintiera cuidado y especial, lo invitaba a salir, comer, ir de fiesta, paseos, regalos de cumpleaños o incluso sin motivo. (Muchas veces él se sentía incomodo por esto, pero yo le insistía bastante).


Este patrón de salvadora también lo use en TODAS mis relaciones anteriores. La trampa de esto es que tu mente te dice: “si generas una deuda afectiva (o incluso económica) en él, entonces le va a dar remordimiento dejarte”.


Ser “la salvadora” es una forma de controlar la relación siendo la mamá de tu pareja; pero no funciona, porque esa persona no TIENE que decidir su vida en torno a ti y lo que haces por él/ella. Y si en la relación hay otras carencias y conductas disfuncionales (tóxicas) que hacen que el vínculo no funcione, vas a sentir que se aprovecharon de ti porque luego de dar TODO, igual no funcionó.

En busca de ser la salvadora, Gia prepara una estrategía completa para tener el amor de su nuevo vínculo

Y así me sentía yo; me inventaba cualquier cantidad de planes pensando que esto lo

enamoraría y se decidiría a tener una relación formal conmigo, pero no pasaba, así que me cansaba y me alejaba un poco, generando en él la respuesta de sentir que “perdía mi atención”, luego me buscaba, yo creía que se “había dado cuenta” y volvía con él a ese vínculo sin nombre que me atormentaba, pensado que sería diferente. ¿Te suena familiar?




1 Comment


Melissa Páez
Melissa Páez
Apr 09, 2024

Me suena totalmente familiar, ahora entiendo desde donde vienen algunos de mis comportamientos, ponerle un nombre e identificarlos me sirve mucho en mi crecimiento y reconocimiento de mi niña herida

Like
bottom of page