top of page

Capitulo XXXIX - Momento de cambios

Si de algo me arrepiento es de no haber visto la abundancia a mi alrededor por solo tener

el foco en lo que me faltaba.


Cuando les hablo de mi decisión de soltería consciente no crean que fue algo súper

sencillo; para nada lo fue. Muchas veces me cachaba en una sensación de pesimismo y

escasez porque aunque conscientemente sabía que era lo mejor, mi sistema nervioso se

sentía en peligro porque siempre había percibido la soltería como algo malo.


Lo puedo notar ahora al darme cuenta de lo poco que aproveché la situación privilegiada en la que estaba: vivía en una casa hermosa con todas las comodidades, mi propia habitación con la piscina al frente, mi amiga que fue la mejor compañera haciéndome sentir amada en todo momento, rodeadas de mucha naturaleza y bendiciones hermosas,

y yo en medio de mi duelo solo veía que me faltaba una pareja.


Fue una lucha interna que no siempre salía ganando, pero gracias a la terapia tenía recursos emocionales para aterrizarme y cuestionar estos pensamientos negativos; con el

tiempo se fueron atenuando cada vez más.


La creación de contenido se convirtió en mi foco nro 1 compartiendo todo este proceso, y

fue muy bonito ver a tantas personas identificarse y agradecer mi apertura; tanto así que

empezaron a llegarme peticiones de consultas 1:1 conmigo; a lo que me negaba porque yo

no era terapeuta o coach para poderlas ofrecer, pero fue esto lo que plantó la semillita

para darme cuenta de que era algo que me gustaría hacer.


Estaba descubriendo tanto sobre el mundo emocional y la forma tan errada en la que

generacionalmente nos vinculamos, que me apasioné. Así que simplemente empecé por

hacer encuentros online con esos seguidores interesados en hablar sobre estos temas y

compartir opiniones; allí entendí que esto era lo mío. (Si me sigues desde esa etapa,

gracias por la confianza)


Siempre he sido de las que si quiero hacer algo voy y lo hago, pero esta vez ya a mis 31 años, no me sentía tan segura como antes. Tenía la idea (súper errada claro) de que un cambio de carrera a esta edad sería muy difícil, también por primera vez sentí que podía defraudar a otros por si quiera pensar en dejar una carrera como artista que me había dado tanto, y que me costó muchas decisiones difíciles para construirla. Así que había una batalla en mi interior entre lo que creía correcto y lo que mi alma me pedía.


Al final ganó la segunda, porque la inteligencia emocional que había construido gracias a estos duelos, también me ayudó a ver que la edad es solo un número y que en un par de años lo que los demás pensaran de mi decisión no sería relevante. Y así fue...


Empecé a buscar opciones de universidades para estudiar psicología, una carrera que

cuando yo tenía 17 años fue mi segunda opción de estudio al salir del liceo, y de hecho fui

aceptada en una universidad importante de mi país para estudiarla, pero también fui

aceptada en la universidad de danza a la que era aún más difícil entrar, y mi mamá como

amante de las artes y mi fan número 1 me alentó a irme por esa opción.


Así que por cosas de la vida, luego de una carrera artística hermosa que me había llevado

a bailar y cantar para ganarme la vida conociendo el mundo, en esta nueva etapa estaba

lista para ir por esa segunda pasión que SIEMPRE estuvo en mi.


No tenía para pagar la carrera, vivía de mis ahorros los cuales cada vez eran menos, me sentida atrapada en Marruecos, mi pasaporte se había vencido, no tenía trabajo porque aún el mundo artístico estaba paralizado post pandemia (en Europa y el norte de África se tardó mucho más en normalizarse la vida); pero aún así hice lo que si podía hacer: buscar

la información necesaria para construir un plan.


Así que me dediqué a ver qué opciones de universidades online tenía, cuánto dinero

necesitaría, cuánto tiempo tendría para reunirlo. Cuando empiezas a dar los primeros pasos es cuando las cosas se alinean; se toman más tiempo del esperando a veces, pero se manifiestan porque tú te moviste hacia eso.


Yo no sabía cómo lo haría, pero sabía que lo haría; y estoy segura de que poner mi

enfoque en construir mi futuro (aunque fuera de la nada) me ayudó a no quedarme

bloqueada más de lo necesario en el duelo por esto chico; si quería que las cosas hubieran sido diferente, pero ya tenía que soltar esa idea que no se materializó y entender que mi vida no se acabaría allí; que estaba en mi poder construir otra cosa, y benditas las ganas que tenía de salir de ese dolor, porque fueron las que me hicieron moverme cada día para

reconstruir mi vida (unos fue más sencillo que otros y esto es normal).







Comments


bottom of page