
Sobre Gia
Daniela
Toda mi vida me interesé en el estudio del comportamiento humano, de hecho cuando salí del liceo, fui aceptada en una prestigiosa universidad de mi país para estudiar psicología; pero en ese momento estaba por cumplir uno de mis más grandes sueños, formarme como bailarina profesional en el Instituto Univeritario de Danza de Caracas.
Me recuerdo en un escenario cantando, bailando y actuando desde muy pequeña, así que mi decisión fue escoger esa segunda opción.
Mi carrera como bailarina siempre fue mi prioridad. Logré viajar y conocer otras culturas mientras “trabajaba” haciendo lo que más amaba por más de 14 años. Pero aunque por ese lado las cosas iban bien, la que ahora reconozco como una herida abandono de la que no tenia consciencia, y mucha inmadurez emocional me llevaban a conectar en relaciones no tan saludables y que terminaba para pasar a otra y otra, en una carrera por encontrar amor, y sobretodo un terrible miedo a la soledad.
Por más de 12 años seguidos estuve en relaciones, sin permitirme conocerme, y construir una relación saludable conmigo misma.


¿Quién es Gia Daniela?

Ahora descubrí un nuevo propósito, que sin esa tormenta no habría descubierto; ahora quiero acompañar a la gran cantidad de mujeres que al igual que yo, conectan en relaciones de pareja desde una herida de abandono no atendida, y desde un sistema de creencias social súper tóxico que no las permite gozar de relaciones saludables y satisfactorias.
Por eso me formé para hacerlo de la forma más responsable que pueda, y con todo mi
amor.



Y fue hasta el año 2018, cuando el día
de nuestro 5to aniversario (con
compromiso de boda incluido) mi pareja
tomó la decisión de terminar la relación.
Para mi fue como si el mundo se me
cayera a pedazos. Porque vivía en
Marruecos (trabajando como cantante
y bailarina en uno de los mejores
“Diner shows” de la ciudad de Marrakech),
y aunque tenía compañeros maravillosos
y un trabajo soñado; esta persona
era mi mundo.
Mi vida giraba en torno a esta relación,
mi familia estaba en Venezuela y
Estados Unidos, con un océano
Atlántico separándome de ellos. Fueron
los meses más duros de mi vida,
en los cuales toque fondo y no sabía
cómo salir de allí.



No fue sino hasta que decidí buscar
ayuda profesional con una terapeuta
que me diagnosticó un cuadro
depresivo, y con mucha paciencia y
experticia me acompaño a salir
de la tormenta.
El camino no fue fácil, pero ahora
agradezco cada paso; porque fue
necesario para reconstruir a la Gia
que soy hoy.
Aprendí tanto, crecí tanto, que ahora
le agradezco a mi ex pareja por dar el
paso que mi dependencia emocional
no me permitía dar. Y aunque suene
trillado, “perderlo” para encontrarme
es lo mejor que me ha pasado.



Certificaciones



2022
